Hacerse el lugar y crear el hábito
En la actualidad la tecnología nos trajo consigo múltiples herramientas de búsqueda en donde podemos extraer fácilmente información. Entre ellas tenemos las redes sociales tales como Facebook, Twitter o Instagram (la más utilizada últimamente) donde nos invade con contenido acerca de cómo mejorar nuestra alimentación, rutinas de entrenamiento, recetas y entre ellas podremos encontrar la frase “cambiar hábitos”.
En primera instancia, para cambiar hábitos, se necesita tener ganas, estar decidido y sentirlo así. Sin motivación, no hay cambio. Debemos adoptarlos de forma gradual. Vamos a poner como ejemplo la alimentación. Muchas personas al momento de querer realizar cambios, lo hacen de un día al otro y se crean dietas sumamente estrictas, difíciles de mantener en el tiempo. ¿Qué pasa con esto? Muy pocos pueden mantenerlo. Entonces, ¿Qué se debe hacer? Comprometerse.
Les voy a compartir algunos consejos que considero útiles a la hora de querer cambiar hábitos. Desde mi experiencia personal creer en uno mismo es crucial, esto mejora la percepción que uno se tiene. Nuestros pensamientos influyen en nuestro inconsciente, que a su vez, dirige nuestras acciones.
Permitirse cometer errores, dejemos de lado los “permitidos”, a todos nos puede tentar algún alimento. Sepamos encontrar la diferencia entre consumir innecesariamente múltiples alimentos cada media hora y cuando llega el momento en que realmente queremos ingerirlo. La clave es, si tengo un “tropezón”, no castigarme sino continuar con mis hábitos que adopte. Si uno siente el deseo de comer algo, ¿Por qué no lo voy a hacer?
Proponerme objetivos y enfocarme en que hábitos cambiar, identificar qué es lo que me está perjudicando. Cuando nos fijamos objetivos mucho más concisos, es más probable realizarlos.
Busquemos maneras de motivarnos, no se trata de generar un esfuerzo sino de comprometernos al 100%. De no sentirnos motivados día a día con el camino que estamos emprendiendo (en este caso llevado a la alimentación), no podríamos mantenerlo. No nos debemos olvidar que los buenos hábitos que incorporamos son los que nos alimenta la mente y el cuerpo. Es lo que nos motiva a perseverar y perdurar en el tiempo. El hábito se crea, se adopta y se mantiene. Mantengámonos activos y saludables.
@orilobos
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